Una visión más moderada en el futuro económico local es la conclusión final de la 5ta versión de Índice de Percepción Empresarial Regional (IPER), medición semestral que realizan en forma conjunta el Departamento de Estudios de EY, la Cámara de la Producción y del Comercio de Concepción y la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Andrés Bello, desde septiembre de 2011.
Esta última medición, que fue lanzada el 09 de enero, corresponde a noviembre de 2013 y, por lo tanto, es la “fotografía” tomada en un tiempo específico, a un grupo importante de empresarios de diversos sectores productivos, de Concepción, Chillán y Los Ángeles.
Hace exactamente un año atrás, en la encuesta efectuada en noviembre 2012, la visión era auspiciosa, pero ya en junio de ese año, el IPER exhibió cierta incertidumbre, y que se viene a acrecentar en esta última encuesta.
En esta ocasión, el IPER Biobío tuvo una variación negativa de 3 puntos respecto la versión anterior (efectuada en junio 2013), alcanzando los 56 puntos. Esto implica una caída de 5% respecto de la medición anterior; sin embargo, el indicador aún se mantiene en la zona de optimismo. “Esta caída se encuentra alineada con la desaceleración que ha venido mostrando la economía chilena durante el 2013, y con la reducción del rango de crecimiento proyectado por el Banco Central para 2014”, explica Horacio Bustos, Socio de Assurance de EY.
No obstante, esta cautela afecta directamente los planes futuros de inversión. “Nosotros, como gremio empresarial, estamos convencidos de que la inversión es un pilar fundamental para impulsar el desarrollo de nuestra economía regional y crear más y mejores empleos. Vemos con preocupación que, en este último informe, sólo el 22% de las empresas platea que existirá un aumento de la inversión para este año 2014”, puntualiza Alberto Miranda, Presidente de la CPCC.
Esta sensación de querer esperar antes de tomar cualquier decisión en el corto plazo, tiene relación a las discusiones que se presentarán en torno a cambios regulatorios (posible reforma tributaria) y desarrollo de políticas públicas que den respuesta a los problemas sociales que se han presentado en Chile.
A estas observaciones se suman además, aquellos temas coyunturales como es la crisis pesquera y las dificultades de la industria del acero, también los costos en energía, y las dificultades en conectividad e infraestructura.
El factor positivo de esta encuesta tiene relación con que el 64% de los empresarios ha decidido para este año incorporar algún tipo de innovación. “… el IPER es una herramienta tremendamente útil para entender de manera más precisa las siempre tan importantes expectativas empresariales, por lo que si bien éstas se mantienen en un plano relativamente optimista, no deja de ser relevante considerar su tendencia en los últimos 12 meses, para efectos de que las políticas públicas del gobierno entrante no sólo tengan como norte la satisfacción de diversas necesidades sociales, sino que también el establecimiento de un clima pro emprendimiento y pro inversión, que tanto requiere la región del Biobío”, puntualiza Roberto Darrigrandi, Decano de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Andrés Bello.
